El efecto Pigmalión
se puede identificar de las siguientes maneras:
1. Suceso por el
que una persona consigue lo que se proponía previamente a causa de la creencia
de que puede conseguirlo.
2. "Las
expectativas y previsiones de los profesores sobre la forma en que de alguna
manera se conducirían los alumnos, determinan precisamente las conductas que
los profesores esperaban." (Rosenthal y Jacobson).
3.
Una profecía autocumplida es una expectativa que incita a las personas a actuar
en formas que hacen que la expectativa se vuelva cierta.
Caso real de “Pigmalión negativo”
Ana, una profesora de Lengua, seria y motivada, comenzó el curso con una
nueva clase en la que se encontraba Gonzalo, un adolescente que en el curso
anterior y con otro profesor, había destacado tanto en su rendimiento como por
su buena conducta. En su nueva clase, y con la nueva profesora, Gonzalo comenzó
a ir peor tanto en aprovechamiento como en comportamiento, lo que, como es
lógico, preocupaba a Ana, que decidió discutir la situación con sus colegas. La
psicóloga del centro le propuso grabar un video de su clase en el transcurso de
ésta, sin que lo supieran los alumnos. Tras proyectar el video ninguno de los
profesores presentes advirtió nada significativo entre las interacciones entre Ana
y Gonzalo.
La psicóloga decidió ver el video una vez más, pero esta vez a “cámara lenta”,
y es entonces cuando se percató de que Ana fruncía el ceño cada vez que se
dirigía a Gonzalo. Así se lo hizo saber a Ana, la cual confesó no se consciente
de ese gesto. Al ser preguntada cómo “le caía” Gonzalo, Ana confesó con
sinceridad que, a pesar de no tener ningún fundamento aparente, el chico le
caía mal. La psicóloga le explico que ese gesto de fruncir el ceño reflejaba su
actitud negativa hacia Gonzalo y que éste la percibiera sin apenas darse
cuenta; este proceso de comunicación de rechazo del alumno por parte de la
profesora explicaría, según el “efecto Pigmalión”, la disminución del interés de
Gonzalo por sus estudios, al menos con respecto a la asignatura de Lengua. Ana dejó
de fruncir el ceño y se esforzó en modificar su actitud hacia Gonzalo, quien
gradualmente comenzó a mejorar.
¡Hola!
ResponderEliminarLa entrada está muy interesante.Conocía el efecto "Pigmalión", pero me ha encantado el caso real que habéis expuesto. Es increíble como los/las maestros/as podemos llegar a influir en los/las alumnos/as.
Un saludo.
¡Hola!
ResponderEliminarEsta entrada la vemos muy interesante. No conocíamos el caso "Pigmalión" pero con la breve explicación que habéis dado y el caso real que habéis expuesto nos a quedado muy claro.Gracias por la información.
Un saludo!